Hace menos de un mes que se ha cumplido el primer año de Gobierno de esta legislatura de la alcaldesa de Alhama, Mariola Guevara, y su equipo tras las elecciones municipales de mayo de 2019.
Un primer año de Gobierno marcado por la pandemia del coronavirus, aunque no han sido pocos los retos y problemas a los que Guevara y el Ejecutivo municipal han hecho frente en los últimos 12 meses.
En esta entrevista, Guevara hace balance de su primer año como alcaldesa electa y afirma que este año "no se me va a olvidar nunca".
En los primeros compases del nuevo Gobierno, la polémica estaba servida con la aprobación de las asignaciones, a la baja, a los grupos municipales de la Corporación y las retribuciones de los concejales del equipo de Gobierno.
Guevara insiste en que no fue la primera decisión del nuevo Gobierno. Recalca que toda Corporación recién elegida celebra este pleno en el que se adoptan estas decisiones.
Sin embargo, levantó una polémica que desembocó pocos meses después, en octubre, con una concentración de protesta en la puerta del Ayuntamiento, a iniciativa de los grupos de la oposición, por la modificación al alza de las ordenanzas fiscales.
Guevara reconoce que esta decisión no fue fácil, pues "ningún alcalde quiere subir los impuestos", pero insiste en que fue una decisión meditada y necesaria para afrontar los retos que tienen por delante. Una decisión, argumenta, fruto de las deudas heredadas de anteriores legislaturas, el desplome del proyecto de la Paramount y la asunción del Ayuntamiento de competencias impropias que suponen para las arcas municipales 1,5 millones de euros anuales que debería sufragar la Comunidad Autónoma.
La primera edil del municipio reitera la necesidad de una Ley de Financiación Local que permita a los Ayuntamientos saber con antelación con qué dinero contarán para el siguiente ejercicio, pero hasta el momento desde el Gobierno regional no se tienen noticias de esta ley. De hecho, en las reuniones semanales que el presidente López Miras ha mantenido con los 45 alcaldes de la Región, en ninguna se ha referido a este tema, algo que muchos alcaldes esperaban oír, afirma Guevara.
La pandemia de la Covid19
Entrados en 2020, la pandemia del coronavirus interrumpió abruptamente la vida de todos los vecinos así como el funcionamiento del propio Ayuntamiento que tuvo que implementar un plan de actuación y protocolos de seguridad en tiempo récord ante la inminencia de la declaración de un estado de alarma que se prolongaría finalmente hasta casi los 100 días.
El mismo funcionamiento del Ayuntamiento también se vio afectado a finales de 2019 por un ataque ciberterrorista que inutilizó todos los ordenadores del Consistorio y en cuya recuperación aún se está trabajando.
Sin embargo, la salud y la seguridad de los vecinos de Alhama ha sido la principal preocupación del equipo de Gobierno, refiere Guevara. "Desde el primer momento, hemos estado atendiendo cualquier necesidad que se presentara", recalca.
Para ello, ha sido fundamental la actuación de los Cuerpos de Seguridad, como Policía Local y Guardia Civil, con cuyos responsables la alcaldesa ha mantenido reuniones a diario, así como con los voluntarios de Protección Civil y las brigadas municipales para atender las necesidades del municipio.
La cara y la cruz del estado de alarma
La ola de solidaridad, ha sido uno de los puntos destacados por la alcaldesa, no solamente por la encomiable labor de ONGs, como Cruz Roja, Cáritas o la Asociación ProAyuda Alimentaria sino también por la bolsa de voluntarios que puso en marcha el Ayuntamiento, teniendo que cerrarla en pocos días por la avalancha de vecinos que se ofrecieron a ayudar.
Es una de las notas positivas que ha traído la pandemia de la Covid19 en nuestro municipio, la solidaridad, pero también el estado de alarma ha acrecentado una tensión e incertidumbre que ha desembocado en una agria polémica con las actuaciones de algunos agentes de la Policía Local.
Un conflicto que ha provocado ya la interposición de denuncias de algunos vecinos en la Guardia Civil. Ante ello, Guevara indica que desde el Gobierno municipal se van a poner en marcha medidas que den unas mayores garantías a los ciudadanos y a los agentes en su labor como son las anunciadas videocámaras a los agentes (anuncio que se hizo esta semana pasada), mientras que, como ya explicó hace unos días, las denuncias y las quejas siguen sus respectivos procesos judiciales y administrativos como legalmente están establecidos.
Planes y proyectos tras el estado de alarma
No cabe duda que los planes para este año y los venideros han trastocado los tiempos para desarrollar los proyectos de legislatura, como son el nuevo recinto Ferial en Nueva Espuña o el parque de La Cubana con su espacio termal. Guevara confía en poder poner en marcha todos los proyectos "o que al final de la legislatura, al menos, estén iniciados".
Igualmente, confía en que la Comunidad Autónoma cumpla al menos las cuatro reivindicaciones que se solicitan, ya desde la pasada legislatura, como es la próxima construcción del nuevo IES Valle de Leiva, la reparación de la carretera RM-515 y los proyectos de mejora para la Residencia Virgen del Rosario y el Centro de Salud.
La pandemia del coronavirus ha sembrado de tal incertidumbre las vidas de todos los ciudadanos, que ni siquiera la alcaldesa puede prever qué sucederá en los próximos meses. Lo que, de momento, parece más claro es que, mientras el virus siga circulando y sin vacuna, la normalidad que teníamos hasta marzo de 2020 no será y habrá que aprender a vivir en la nueva normalidad con limitaciones y normas.
Ello también tiene y tendrá su repercusión en las celebraciones. Ya ocurrió con la Semana Santa y con la Fiesta de los Mayos y es previsible que la Feria de Alhama se vivirá este año de una manera diferente.
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