Antes de esta pandemia que estamos sufriendo hubo más, y las que quedan por venir (gracias a ese cambio climático que muchos parecen ignorar). El mundo del cine ha contado muchas de ellas y en los comics ha habido desde apocalipsis zombis como el de The Walking Dead hasta virus que acaban con el cromosoma Y, dejando un mundo para ser liderado por las mujeres (en breve lo veremos en la serie Y: el último hombre).
En la serie que os recomiendo esta semana otro virus hace que comiencen a nacer bebés híbridos, mitad humanos mitad animales, como el niño protagonista llamado Gus. Tiene unos cuernos y unas orejas de ciervo y es de los pocos que saben hablar, ya que su padre lo enseñó a leer y hablar desde muy pequeño.
Con la ayuda de un antiguo jugador de béisbol deciden ir a buscar a su madre a la otra punta del país. En su camino se van a encontrar con otros híbridos y con grupos de cazadores que creen que la cura del virus está en la muerte y estudio de sus cuerpos.
Está basado en el cómic de Jeff Lemire del mismo título, el cual se comenzó a publicar en DC en el 2009. Como siempre, descubriréis muchas diferencias entre comic y serie ya que este último medio busca el éxito ante el público y muchas veces obvia el alma y la profundidad de las historias que se pueden retratar en las viñetas.
Lo mejor: el mundo apocalíptico por el que se mueven los protagonistas, lleno de personajes que nos desgranan historias de superación, de pérdidas desgarradoras y de quienes sueñan con salir de las cenizas de ese caos en el que está metido el planeta.
Lo peor: que no es temporada única, ya que el cómic es extenso y salió una segunda parte. Que algunos personajes del cómic no aparecen y le hubieran dado vidilla a esta primera temporada.
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