La alcaldesa María Cánovas y el edil de Urbanismo, José Pedro Otón, han presentado la finalización de las obras de rehabilitación de los Almacenes del Taibilla. Este edificio se transforma ahora en un espacio cultural. Será una infraestructura destinada al desarrollo cultural de Alhama de Murcia y contribuye a la regeneración urbana de la zona.
La alcaldesa ha explicado que con la rehabilitación se da respuesta a las peticiones de numerosas asociaciones y vecinos con inquietudes culturales.
Las obras han dotado al edificio de un estudio de grabación, diseñado para fomentar la creación musical y permitir que los grupos locales puedan grabar sus propias maquetas en condiciones profesionales.
Por su parte el concejal José Pedro Otón ha explicado que las obras han sido ejecutadas con criterios de sostenibilidad e innovación. Se ha priorizado el reciclaje de materiales y el uso de elementos sostenibles. Además, se han instalado placas solares y se han reutilizado elementos originales, como las tejas y las cerchas de madera. El espacio ha sido diseñado para obtener una calificación energética A.
La rehabilitación ha supuesto una inversión total de 941.000 euros. Se ha contado con una financiación de 420.000 euros procedentes de fondos europeos en el marco de la segunda convocatoria del programa Iniciativas Urbanas Europeas-Acciones Innovadoras (EUI-AI).
El presupuesto inicial era de 760.000 euros. "Debido a diversas problemáticas que han surgido a lo largo de la ejecución de la obra, que no estaban previstas en el proyecto inicial, la obra se ha encarecido y ha supuesto un esfuerzo adicional para el presupuesto municipal de 200.000 euros", ha explicado José Pedro Otón.
El nuevo espacio está diseñado para ser inclusivo y multifuncional. Cuenta con accesos adaptados, aseos accesibles y señalética adecuada, y permite la realización de diversas actividades como talleres, clases de danza, conciertos y teatro. Además, se han incorporado contenedores marítimos reciclados como salas de ensayo y espacios polivalentes, integrando una grada interior que mejora la experiencia de los usuarios. Este diseño innovador combina elementos tradicionales e industriales, adaptándose a las necesidades actuales y futuras de la ciudadanía.
La zona verde anexa será un punto de encuentro para los vecinos del barrio, con áreas sombreadas y espacios abiertos que fomentarán la convivencia. La alcaldesa ha explicado que "este espacio se convertirá en un lugar de referencia para jóvenes y familias, ofreciendo alternativas de ocio inclusivas y accesibles".