"No sé qué hacer ni a quién dirigirme". Es el lamento de una vecina de la calle Juan de Austria en el Barrio de los Dolores ante lo que sufre cada día.
En la puerta de su casa, día sí día también, 'vienen' a hacer sus necesidades los perros dejando allí sus orines que provocan malos olores. "Al abrir la puerta siempre encuentro todo lleno de pipí y con un fuerte olor", explica a Siete Días Alhama.
"Todos los días los dueños pasean sus perros por la baldosa y se hacen pipí en mi puerta", explica nuestra vecina. Entiende que los canes puedan sentirse atraídos a su vivienda porque tiene dos perritas, pero los propietarios deben ver que sus mascotas están haciendo sus necesidades en la puerta de una vivienda, lo que le parece incomprensible que dejen que sus mascotas hagan sus necesidades allí. "Los dueños no tienen vergüenza", lamenta.
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