Ciudadanos de la Región de Murcia ha dejado de existir en el Congreso de los Diputados. Los dos escaños que obtuvo la formación naranja el pasado 28 han ido a parar a Vox y el Partido Popular, principales beneficiarios de la sangría de votos de la formación de Albert Rivera. Casi 100.000 electores han retirado su apoyo a Ciudadanos, que ha pasado de 150.289 a 51,901 votos (98,46% escrutado).
El desastre electoral de la formación naranja ha convertido a Vox en el partido más votado en la Región y ha colocado al Partido Popular como segunda fuerza política en Murcia. por delante de PSOE.
También pierden apoyos los partidos de izquierdas. El PSOE obtuvo 190.540 votos en abril y ahora ha conseguido 173,932. Sin embargo, el porcentaje de apoyo ha sido ligeramente mayor al pasar del 24,77% hace siete meses al 24,83% en noviembre.
Por su parte, la formación morada cae de 80.053 votos en abril a 61.954 en noviembre. La mayoría de los electores que han retirado el apoyo a Podemos ha apostado ahora por Más País-Equo, que consigue 13.002 votos.
Tanto socialistas como podemitas conservan sus escaños. El PSOE continuará con tres representantes en el Congreso de los Diputados y la formación morada mantiene el suyo.
Más complicado aún
Si el panorama político a nivel nacional era complicado antes de las elecciones, ahora se dibuja un escenario casi imposible tras de debacle de Ciudadanos, que ha perdido el papel de partido bisagra.
Cae ligeramente el PSOE (0,65 puntos porcentuales al 98,43% escrutado) y pierde tres diputados al pasar de 123 a 120.
Mucho mayor es la pérdida de Podemos, que se deja siete diputados al pasar de 33 en abril a los 26 actuales. Dos de ellos han ido a parar a Más País-Equo.
En cualquier caso, los partidos de izquierdas no suman suficientes escaños para formar Gobierno en solitario. De hecho, antes tenían el apoyo de 156 diputados y ahora son 148, dando por hecho los dos que aportaría Más País.
Por el contrario, Partido Popular (87 diputados) y Vox (52 diputados) aumentan su representación. Sin embargo, están muy lejos de la mayoría absoluta.
El principal problema para formar Gobierno sin el apoyo de partidos nacionalistas y regionalistas es el pésimo resultado obtenido por Ciudadanos. La formación de Albert Rivera ha pasado de ser un partido imprescindible para la gobernabilidad de España a ser una fuerza política prácticamente irrelevante. De hecho, en la formación del futuro Ejecutivo tienen más que decir los 13 diputados obtenidos por ERC que los 10 de la formación naranja.
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