Unas veces con ritmos melancólicos y otras más animados, los vecinos y visitantes de La Costera se trasladaron anoche a algún remoto rincón del Oeste Americano con la música de Los Alacranes. El concierto de este grupo country sirvió de cierre a la Concentración de Vehículos y Transformaciones, que el sábado sumó su segunda edición.
La calle principal de la pedanía y el parking junto al campo de deporte se convirtió ayer en un museo de las cuatro ruedas. Coches de hace unas décadas compartieron espacio con otros que van camino de sumar un siglo de existencia. Algunos son joyas de las que sus dueños no serían capaces de deshacerse, otros atesoran recuerdos de toda una vida y los 'maduritos de buen ver' permiten comprobar cuánto ha cambiado la industria del automóvil en sólo unos años.
El programa de actos comenzó a las 18:30 horas con la entrada de los primeros vehículos, que no dejaron de llegar hasta bien avanzada la tarde.
A continuación, a las 19:30 horas se proyectó un vídeo que sirvió a Juan Diego Muñoz para explicar cómo había creado un prototipo, un vehículo construido de la nada y que, en su caso, sólo puede ser utilizado en competiciones especiales.
Después tomó la palabra Paco Espadas, director de COPE Espuña y presidente de Custom Alhama para hablar de una de sus pasiones, las motos. Su charla, centrada en el comentario de un puñado de fotos, llevó el título de 'El mundo bajo las ruedas'. Los moteros de este club también estaban invitados a la concentración.
Luego llegó el momento de hacer rugir los viejos motores de los vehículos clásicos para realizar una ruta paronámica.
Y finalmente, una barbacoa y la música de Los Alacranes cerraron el programa de actos, con toda probabilidad, hasta el próximo año ya que la Concentración de Vehículos Clásicos de La Costera aspira a convertirse en una cita ineludible para nostálgicos de las cuatro ruedas que disfrutan mostrando unos vehículos que son auténticos tesoros que nos hablan de nuestra historia más reciente.
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