La ampliación y modernización de las piscinas municipales del Complejo Deportivo Guadalentín no es un simple proyecto de obra. Es, o debería haber sido, una apuesta estratégica para mejorar los servicios públicos, fomentar el ocio familiar y garantizar que Alhama disponga, por fin, de unas instalaciones estivales acordes a las necesidades reales de sus vecinos. Por eso sorprende y preocupa la deriva que está tomando una intervención que nació sólida, completa y financiada, y que ahora se diluye en un proyecto insuficiente.
El proyecto impulsado por el Partido Popular de Alhama de Murcia y avalado por la CARM dentro del Plan de Obras y Servicios 2024-2025 era riguroso, viable y ajustado a los estándares técnicos actuales. La memoria, firmada por arquitectas e ingenieras especializadas, define con claridad los objetivos: reparar las fugas existentes, construir una nueva piscina infantil con juegos acuáticos y toboganes, ampliar las zonas de playa, crear nuevos espacios de sombraje y modernizar un equipamiento esencial que llevaba años reclamando una intervención profunda.
Es decir, estaba previsto poner las piscinas a la altura de lo que un municipio como Alhama merece. Y hacerlo con una inversión de 608.890 euros, financiada por el Plan de Obras y Servicios de la Comunidad Autónoma, con un plazo de ejecución de cinco meses y lista para la temporada de verano de 2025. Una oportunidad extraordinaria.
Sin embargo, PSOE, IU y Sibina han optado por dinamitar esta hoja de ruta técnica y política para sustituirla por una propuesta pobre, limitada y sin visión de futuro. No hablamos de matices: hablamos de que han eliminado completamente la nueva piscina infantil con toboganes, renunciado a la ampliación integral de las zonas de recreo y reducido la intervención a mínimos obligados por la subvención. No porque la CARM haya recortado fondos, sino por una decisión política que prioriza el capricho sobre las necesidades reales de las familias alhameñas.
Si la subvención no se ejecuta adecuadamente, el Ayuntamiento estará obligado a devolverla.
Ya ocurrió con los casi 400.000 euros perdidos de la Plaza de la Constitución por incumplimiento de plazos. El precedente es demasiado reciente como para ignorarlo. Pero en lugar de aprovechar una financiación asegurada y un proyecto completo, el Gobierno local opta por reducir, recortar y renunciar.
La pregunta es inevitable: ¿A quién beneficia este frenazo? Desde luego, no a las familias que esperan espacios de ocio bien equipados. Tampoco a los niños, que verán desaparecer la zona de juegos acuáticos prevista. Ni a los jóvenes, ni a los mayores, ni a los usuarios habituales del complejo.
Nuestro proyecto no sólo ampliaba servicios, sino que mejoraba y renovaba instalaciones obsoletas, solucionaba fugas y aseguraba accesibilidad y seguridad. Era una propuesta responsable, diseñada desde criterios técnicos y no desde ocurrencias de despacho. De forma paralela, añadiríamos más servicios alrededor del recinto, como un kiosko, y 2 campos de futbol 7.
Frente a eso, el nuevo planteamiento del PSOE y Sibina demuestra una preocupante falta de ambición y una desconexión evidente con el sentir mayoritario del municipio. Alhama lleva años pidiendo más y mejores instalaciones de verano, no menos.
Y cuando, por fin, existía la oportunidad de dar un salto cualitativo, el Gobierno local la reduce a una reforma mínima y sin impacto.
Alhama merece algo mejor
Merece un Ayuntamiento que entienda que Alhama no se puede dirigir desde el capricho de unos pocos a costa de las votaciones de la mayoría.
Y, sobre todo, merece instituciones que trabajen para mejorar la vida de la gente, no para bloquear proyectos por motivos partidistas.
Si (
No(
