El primer punto del pleno de enero fue la aprobación inicial de la nueva ordenanza de terrazas que obtuvo este martes el voto a favor de todos los grupos políticos, salvo Cs Alhama que se abstuvo.
Ahora se inicia el trámite del nuevo texto que viene a regular la instalación de las terrazas de los locales de hostelería en Alhama de Murcia. Durante 30 días los alhameños podrán presentar las alegaciones que consideren antes de su aprobación definitiva.
La búsqueda del consenso y el equilibrio entre las necesidades de hosteleros y vecinos han sido las máximas seguidas para la elaboración de la nueva ordenanza. En su exposición, la concejal de Hostelería, Leticia Pareja, ha destacado el difícil camino que ha tenido la elaboración de la ordenanza de la que se han planteado varios borradores en los últimos tiempos.
La larga elaboración de la ordenanza fue uno de los puntos que criticaron los grupos de la oposición. Especialmente desde Cs Alhama. Su concejal, Juan Cerón, afirmó que en la pasada legislatura la concejal del área "fue incapaz" de llevar a cabo la nueva ordenanza y en estos 4 años la edil Leticia Pareja no ha presentado el texto hasta ahora, a tres meses de las elecciones municipales.
En general, los grupos de la oposición alabaron la implicación de vecinos y hosteleros en la elaboración de la ordenanza de terrazas con las concesiones que ambas partes han hecho para que el texto salga adelante en un equilibrio entre el trabajo de la hostelería en Alhama y el descanso de los vecinos.
Uno de los puntos más polémicos fue el artículo 4 de la ordenanza. En él se deja al Ayuntamiento de Alhama cambiar las áreas de ocupación de las terrazas bajo el criterio del "interés general".
La redacción del artículo está abierta a múltiples interpretaciones como criticaron desde Cs Alhama y Vox. La concejal Pareja explicó que los cambios que se puedan acometer por interés general está dirigido especialmente a momentos específicos como desfiles por la calle La Feria que obliguen a cambiar la ubicación o levantar las terrazas o que por obras no se puedan poner las mesas en una calle determinada.
A pesar de la, a priori, "buena fe" de este artículo, las decisiones que se puedan tomar bajo éste, opinó Cerón (Cs), puede conllevar denuncias contra el Ayuntamiento. La concejal de Vox, Silvia Núñez, consideró que este "artículo comodín" por su redacción abierta, da lugar a interpretaciones y decisiones que pueden perjudicar a hosteleros y vecinos.
Cs Alhama considera que este artículo deja un "vacío legal" si no se redacta de nuevo y por ello se abstuvo en la votación.
En el pleno hubo un consenso en que las negociaciones entre vecinos y hosteleros fueron muy duras y en ocasiones "acabaron como el rosario de la aurora", pero los grupos políticos han agradecido la implicación de unos y otros. Especialmente de los vecinos de la zona del Ral donde se concentra un mayor número de establecimientos hosteleros.
Desde el Grupo Popular, criticaron la falta de trabajo del equipo de Gobierno en estos años para sacar adelante la ordenanza y la falta de determinación para adoptar decisiones que apoyen al potente sector hostelero en el municipio. Su portavoz, María Cánovas, lamentó que tras el confinamiento, desde el Ayuntamiento no se haya apoyado más al sector hostelero del municipio como sí se hizo en otros de la Región. Cánovas insistió en que el PSOE de Alhama pudo haber hecho más por los hosteleros, pues considera que es un sector prioritario para que Alhama no se convierta en "un pueblo dormitorio".
Otra de las novedades de la ordenanza es la inclusión por primera vez de un régimen sancionador. Hasta ahora, destacó Pareja, no se podía actuar ante ciertas denuncias vecinales porque no existía ni una prohibición expresa ni una autorización, como el caso de la colocación de carpas.
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