La Policía Local de Alhama detuvo el pasado sábado al acompañante del conductor de un vehículo por un delito de atentado contra los agentes de la autoridad y otro de desobediencia grave. Según informa el Cuerpo en su red social, los agentes tuvieron que emplearse a fondo para reducir al detenido que la emprendió a patadas y puñetazos.
Los ocurrieron durante un control de tráfico. Los policías estaban realizando la prueba de alcoholemia al conductor del citado vehículo cuando uno de los acompañantes trataba, según indica de la Policía Local, de obstaculizar la labor de los agentes.
Hizo caso omiso de las indicaciones de los policías en cuanto a la distancia de seguridad. Comenzó a increparles y se negó en varias ocasiones a identificarse, asestando a los agentes "patadas y puñetazos", explica el Cuerpo, "por lo que éstos se veían obligados a reducirle no sin esfuerzo dada la gran resistencia opuesta por el sujeto".
El detenido se enfrenta a tres años de prisión por un delito de atentado y un año de cárcel por un delito de resistencia y desobediencia grave, recuerda el Cuerpo.
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