Con la nueva normalidad, los alhameños han recuperado sus rutinas como hacer la compra en el Mercado de Abastos. Durante el confinamiento, incluso ha habido vecinos que descubrían por primera vez nuestra emblemática Plaza y aún hoy, tras el estado de alarma, regresan para comprar alimentos de primera calidad.
Así lo perciben nuestros mercaderes quienes también han vivido intensamente las semanas de confinamiento en una adaptación imprevista a la demanda de los clientes. Los repartos a domicilio, que aún hoy se prestan, o el pago con tarjeta, que ha venido para quedarse, son algunas de las novedades de los servicios que ofrecen nuestros mercaderes al tiempo que todos nos venimos acostumbrado al uso de las mascarillas y a las distancias de seguridad.
Han estado al pie del cañón durante las semanas de estado de alarma, como servicios esenciales, y ahora reciben con los brazos abiertos a sus clientes para seguir ofreciéndoles los mejores productos y una atención personalizada que en pocos lugares se prestan.
Este verano perciben que los alhameños no tienen muchos planes de vacaciones y prefieren quedarse en el pueblo, yendo a la playa o al campo, pero comprando en el Mercado de Abastos. Un verano atípico por la situación que estamos viviendo, pero con optimismo en la Plaza de cara a la 'vuelta al cole'.
Los mercaderes que han hablado con Siete Días Alhama tienen algunas propuestas para dinamizar el consumo en el mercado así como potenciar los valores diferenciales de comprar en la Plaza.
Campañas de divulgación de esos valores, actividades en el mercado para niños y mayores, incentivar a los jóvenes a comprar en la Plaza, por ejemplo, facilitando más aparcamientos son algunas de esas propuestas a tener en cuenta.