El Tajo "se gestiona mirando a los intereses del Levante", ha asegurado José Luis Martínez Guijarro, vicepresidente primero de Castilla-La Mancha. Y ha segurado que el Ejecutivo de esa Comunidad Autónoma recurrirá la aprobación del trasvase de 20 Hm3 que previsiblemente aceptará la Comisión de Explotación de esta infraestructura si existe "la más mínima sospecha de que el acuerdo puede ser ilegal".
El envío del agua del Tajo al Segura es más que previsible ya que los pantanos de Entrepeñas y Buendía superan los 400 Hm3 que contempla el memorándum para realizar trasvases. En relación a ese documento, Martínez Guijarro ha afirmado que "fue una traición al Tajo" de la expresidente popular Maria Dolores de Cospedal.
En opinión del vicepresidente castellano-manchego, la solución a los problemas de falta de agua en el Levante son la desaladoras. En este sentido, ha afirmado que durante los meses de sequía en los que no ha habido trasvases, Murcia, Alicante y Almería han utilizado ese recurso para hacer frente a la situación. Sin embargo, ha señalado que la cuenca del Segura no utiliza esos recursos, "que tiene a escasos metros" por una "cuestión de precio". De hecho, afirma que hay desaladora que no estár en marcha y otras que sólo funcionan al 30% de su capacidad. "El agua del trasvase es mucho más barata que la de las desaladoras", ha señalado.