El auditorio municipal ha acogido este viernes el primero de los conciertos del Alhama Folk con Malvariche que no defraudó a su público y el Bichogüei resonó en el fin de semana grande para Los Mayos de Alhama.
La mayor parte del público acudió con su traje de corremayos para escuchar a los artífices de una de las fiestas más divertidas del municipio. Dado que el año pasado la fiesta de Los Mayos y el Pasacalles se celebraron a medio gas a causa del confinamiento del primer estado de alarma por la pandemia, este año se ha podido celebrar con algo más de libertad.
A la entrada, control de temperatura y datos, uso de la mascarilla obligatorio así como permanecer sentado durante todo el concierto.
Quizá ese fue el punto más cruel del concierto, tener que permanecer sentado mientras Malvariche tocaba el Bichogüei que transportaba a los presentes al popular y populoso pasacalles de corremayos.
Junto con otro clásico 'Tiene que llover', Malvariche ponía el broce de oro al concierto cuyo repertorio, como no podía ser de otro modo, estuvo centrado en los temas de su últiimo disco 'Abonico'. Durante el mismo hubo recuerdos al padre de Rafael Medina, así como para el Tío Juan Rita y la cuadrilla de Aledo, y la participación de la Coral Discantus.
Esta noche de sábado a las 21:00 horas el Alhama Folk cierra sus puertas con el concierto de Juan José Robles que interpreta los temas de su último trabajo 'In-quietud'.
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