Tres ex alcaldes, una historiadora, la vecina que ayudó en la mayoría de los partos que tuvieron lugar a partir del siglo XIX... Sus nombres figuran en diversas calles de Librilla desde el pasado viernes. Ese día el Auditorio Municipal acogió el acto oficial con el que el Ayuntamiento quiso reconocer la figura de varios vecinos y ciudadanos que desarrollaron parte de su actividad en Librilla. Desde entonces, una de las calle lleva el nombre de Antonio Soto Alcón, maestro de profesión, pero totalmente involucrado en la creación artística. Poeta, narrador, pintor... continua creatividad le llevó en 2005 a recibir el título de 'Pintor Europeo', otorgado por el Parlamento Europeo.
El viernes también se rememoraron sobre el escenario figuras políticas como la de José María Lara, primer alcalde tras las elecciones democráticas, o Juan Porras, que desde el sillón de la Alcaldía propició la creación del Polígono Industrial de Cabecicos Blancos, o José Martínez Cerón, electricista de profesión y que cuando estuvo al frente del Ayuntamiento trabajó para que Librilla contara con infraestructuras que hoy son consideradas básicas.
El acto, que abrió la actual alcaldesa, Mar Hernández Porras, empezó con el homenaje a dos intelectuales murcianos de la talla de Carmen Conde y José María Párraga. También se reconcoció la labor de vecinos como José Hernández Hernández, un agricultor que, de manera altruista, favoreció la difusión de las enseñanzas musicales en el municipio.
Además, junto a artistas e intelecutales de la talla de José María López o Antonio Soto, también se homenajeó a Josefa Sánchez Rubio 'la Mata', que ayudó a traer al mundo a la mayoría de los librillanos de cierta edad y que vieron la luz a partir del siglo XIX. Además, se recordó la figura de Cipriano Galea, nacido en Librilla y que desarrolló en La Ñora la mayor parte de su labor como docente. Allí tiene el que puede ser considerado el primer monumento a un maestro en España.
También se recorgó la figura de María del Carmen Melendreras, la historiadora que ideó el actual escudo del municipio a partir de sus investigaciones.
El Auditorio acogió un emotivo acto en el que la justicia y el reconocimiento compartieron escenario con los recuerdos y el sentimiento de agradecimiento.
Un magnífico concierto ofrecido por la Banda Sinfónica Las Musas puso fin a una magnífica velada.