Hubo alhameños en prácticamente todas las épocas históricas. Es un hecho que demuestra la importancia de estas tierras y el valor estratégico de la elevación sobre la que hoy se asienta el Castillo y de la cima próxima. En este último lugar, en el cerro de Las Paleras, donde existió un asentamiento entre los siglos VII y X dC, coincidiendo con la creación del Califato de Córdoba, continúa la búsqueda de datos de nuestro pasado. Medio centenar a de estudiantes de Historia, Arqueología y Ciencias forman parte del campo de trabajo cuyo primer objetivo es la búsqueda de piezas que nos ayuden a completar el rompecabezas de la historia de Alhama.
Los jóvenes actúan bajo la supervisión de un equipo de arqueólogos formado por seis profesionales y coordinados por José Baños, arqueólogo, técnico municipal y cronista oficial de Alhama. Además de buscar restos de valor que permitan reconstruir nuestro pasado, también realizan labores de conservación y de puesta en valor del yacimiento,
Fruto de ese trabajo y del realizado en campañas anteriores, ha sido posible descubrir cómo vivian los pobladores de Las Palera a partir de los restos de la arquitectura de sus viviendas y edificaciones, de los hallazgos cerámicos y de los vestigios arqueobotánicos. Todo ello ofrece una panorámica cada vez más nítida de cómo fue el día a día de nuestros antepasados durante los siglos VII y X.
A sólo unos metros y sin apartar la vista de los estudiantes ni un sólo segundo está la torre de la fortaleza, que mira los restos de lo que fue el primer asentamiento en Alhama antes de que sus moradores decidieran trasladarse al lugar que hoy ocupan los restos del Castillo. Todo se encuentra dentro de un área de 20 hectáreas caracterizadas ofrecer un absoluto dominio visual de esta parte del Valle del Guadalentín.
El Castillo es otro asunto; tiene poco que ver con Las Paleras desde un punto de vista administrativo, de estudio y de su puesta en valor. En 2008, cuando los más despiertos ya intuían la verdadera dimensión de la crisis económica que se nos venía encima, se invirtió 1,2 millones de euros en este monumento. Fue un dinero proveniente del 1% Cultural y que permitió llevar a cabo importantes trabajos dentro del recinto.
Desde entonces, una imponente grúa no ha dejado de girar aburrida y libremente como una veleta junto al torreón a la espera de que nuevas partidas permitan retomar las obras.
Será a la vuelta de vacaciones cuando probablemente sepamos si continúa la puesta en valor del monumento más emblemático de Alhama. El Ayuntamiento ha presentado otro año más su proyecto de restauración al Ministerio de Fomento con el objetivo de que la Administración central financie el 70% de coste de los trabajos, estimado en 1,6 millones de euros. El restante 30% deberá salir de las arcas municipales. Ese dinero permitiría abordar labores en los restos de las viviendas cristianas situadas en la parte inferior del reciento y en los accesos a la fortaleza.
La respuesta del ministro José Luis Ábalos y de su mano derecha, el murciano Pedro Saura, a la vuelta de las vacaciones. Para entonces, los estudiantes del campo de trabajo de
Las Paleras estará preparándose para regresar a las aulas. Y quizás su esfuerzo, realizado bajo un sol de justicia durante estos días de máximo calor, haya servido para ayudar a completar algún capítulo de nuestra historia más lejana.
En memoria de Rida
Este año el campo de trabajo rinde homenaje a Rida, el joven fallecido hace unos meses y que en las últimas campañas había venido colaborando en las excavaciones junto a su madre Rachida. Esta mañana, el delegado del Gobierno, Diego Conesa, junto a la alcaldesa Mariola Guevara, y los concejales Francisco Navarro y Nani Navarro han recordado al chico en un pequeño acto en el que también han participado responsables del campo de trabajo. La madre del chico, que también colabora en esta campaña de excavaciones, ha vuelto ha agradecer el apoyo de la multitud de ciudadanos que le han hecho llegar palabras de ánimo.
El espíritu de Rida sigue muy presente en el yacimiento de Las Paleras, donde ha dejado huella el carácter amable y cariñoso de este adolescente que supo hacerse querer por todos los que le conocieron o por quienes se cruzaron en su vida.
Si (
No(
