Emoción entre los numerosos padres, madres y familiares que han asistido a la procesión y cierto desconcierto entre los alumnos de la Escuela Infantil Gloria Fuertes que esta mañana han visto el patio de su cole convertido en el lugar de encuentro de los pasos del Resucitado y de la Virgen de los Dolores.
Niños y niñas de todas las edades, desde los más pequeños vestidos de bolsas de caramelos a los más grandes uniformados de legionarios o engalanadas con los trajes de manolas, han participado en el desfile procesional que ha puesto el broche de oro a la Semana Santa de 2024.
Los primeros en salir al patio han sido los más pequeños en brazos de sus seños para ocupar un lugar de privilegio en el patio, a la sombra de la caseta central, desde donde han contemplado cómodamente la procesión.
A continuación, han ido procesionando las diferentes cofradías y hermadades de cada clase, todas con sus túnicas y capas características y tras los estandartes que los identificaban.
Uno de los momentos más esperados, como ocurre en la Semana Santa de los mayores, ha sido salida de los legionarios, que han estado acompañados por las manolas con sus trajes de encaje y peinetas doradas. Han desfilado tan juntos y tan coordinados unos y otras que hasta alguna manola ha marcado el paso militar.
Y junto a los legionarios y su trono con el Recusitado, han salido los músicos del Ateneo Músico Cultural Maestro José Antonio Ayala con elegantes chaquetas azules y corbatas a juego. Ambos grupos se han dirigido por separado hasta la parte trasera de la caseta del patio, donde les esperaban los armaos con su trono de la Virgen de los Dolores.
En ese instante, se ha producido el momento cumbre del desfile. Al ritmo de la música interpretada por la banda que esta mañana ha acudido al colegio, los niños han hecho bailar los tronos. Han sido los armados y los legionarios. Y tras perder la Virgen su manto de luto y levantar las imagenes de Jesús y su Madre al cielo al tiempo que decenas de palomas alzaban el vuelo, se ha vuelto a repetir la escena.
Después del segundo Encuentro, en un arrebato de emoción y devoción, han sido los músicos de la Banda Titular quienes han cogido el trono de la Virgen para emprender el camino de regreso a las aulas.
Una vez en la entrada del colegio, el público ha podido asistir a una escena insólita: el típico caracol que realizan los armaos, protagonizado en esta ocasión por legionarios y manolas. Toda una innovación que puede servir para hacernos una idea de los cambios que llegarán a la Semana Santa de Alhama de Murcia cuando estos pequeños estén al frente de la Cofradías y Hermandades de nuestra localidad.
Y, finalmente, para reponer fuerzas después de una mañana de grandes esfuerzos y emociones, las maestras han repartido raciones de gusanitos que los niños han degustado mientras disfrutaban de las últimas interpretaciones de la banda.
Un broche de oro, lleno de sorpresas, a la Semana Santa de Alhama de Murcia.
Enhonrabuena a las maestras y padres por todo el trabajo realizado.
Si (
No(
