En Psicología, se llama disonancia cognitiva a la tensión interna que provoca sostener un comportamiento o una idea que entra en conflicto con las propias creencias. Uno podría pensar que esto le ha ocurrido a muchos socialistas alhameños durante esta semana, pero probablemente no a tantos como debería. Al fin y al cabo, no todos creen realmente en aquello que dicen creer. Ya decía Marx (Groucho) aquello de que “Estos son mis principios, pero si no convienen tengo otros”.
Con la nueva polémica entre Teresa Rodríguez y la Ministra de Igualdad, se hace difícil no hablar del tema local de la semana. (Teresa era hasta hace dos telediarios la secretaria general de Podemos Andalucía, y ha sido despedida de ese cargo y echada del partido aprovechando su baja por maternidad). Por supuesto, Mariola, digo la ministra, dice que esta purga no tiene absolutamente nada que ver con el feminismo, con la protección de la maternidad o con la más absoluta infamia. Son “gajes de la política, que no para porque estés de baja por maternidad y no tienen nada que ver con el machismo”. El contrapunto bufo lo pone “la ex” del alfa (aka Tania Sánchez) haciendo notar el agravante de intentar hacer pasar por histeria la legítima queja de Teresa.
Qué cosas pasan en la política nacional. Qué cosas tienen la izquierda y la otra izquierda. ¿Cómo va a ser un comportamiento machista aprovecharse de una baja de maternidad para atacar y si se puede suprimir al adversario, si ellos son de izquierdas? Habrá otra explicación.
La semana que viene volveré a hablar del pabellón, de la desasistencia de los niños que necesitan de atención temprana, de la inoperancia del gobierno municipal, las intempestivas subidas de impuestos o la ignominia de subirse el sueldo cuando la actividad concejal se mantiene por debajo de cero, pero esta semana todavía no puedo dejar de hablar sobre esto.
Si (
No(
