Tras el desfile de Carnaval, el Bar Los Olmos ha invitado a los alhameños a continuar la fiesta en el establecimiento con buena música y mejor ambiente.
Los Picapiedra se dejaron caer por el local y sirvieron los refrigerios que mariposas, raperos y cabareteras solicitaron.
No faltó un extraño personaje con un casco amarillo y gafas impactantes, como otros protegidos frente al coronavirus.
Tanto en el bar como en la terraza el buen ambiente carnavalero se prolongó hasta la medianoche tanto para los que iban disfrazados como para los que no.