Esta mañana he participado como concejal de Educación de Alhama de Murcia en una jornada online organizada por la FEMP sobre educación inclusiva y el programa PROA+, presidida por la alcaldesa de Castellón.
El Programa PROA+ es una iniciativa impulsada por el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes junto a las comunidades autónomas para reforzar la atención al alumnado en situación de vulnerabilidad educativa, ofreciendo apoyo, orientación y acompañamiento en los centros con mayor complejidad. Su objetivo es claro: reducir el fracaso y el abandono escolar, mejorar la convivencia y garantizar la igualdad de oportunidades.
La educación inclusiva no se limita al aula, se trata de un proyecto de formación integral y que no se detiene en las puertas del centro, además, involucra a distintas instituciones, desde los centros a las más altas instancias. La inclusividad tiene que ver con atender la diversidad dentro y fuera de los centros educativos, considerando el entorno familiar y social del alumnado. En ese sentido, los ayuntamientos desempeñamos un papel fundamental, porque somos la administración más cercana, conocemos la realidad de nuestros barrios y podemos coordinar educación, servicios sociales, juventud, cultura y deporte para ofrecer una respuesta integral a la ciudadanía.
Sin embargo, en la Región de Murcia la aplicación del PROA+ no ha sido completa ni puntual. Las condiciones impuestas por el Gobierno regional de Fernando López Miras, junto a los retrasos administrativos y la falta de planificación, han dificultado seriamente su puesta en marcha desde el inicio del curso. Esto ha generado incertidumbre en los centros educativos y ha dejado durante meses sin apoyo a alumnado que lo necesitaba desde el primer día.
La educación inclusiva no puede depender de trámites tardíos ni de decisiones que llegan fuera de plazo. La igualdad de oportunidades no admite demoras.
Desde los ayuntamientos seguiremos defendiendo una educación pública de calidad, inclusiva y con recursos suficientes, porque invertir en programas como PROA+ es invertir en cohesión social, justicia educativa y futuro.