Más desgracias que fortunas tuvo el Lazarillo de Tormes que ahora se dedica a contarlas por los escenarios hasta llegar a Alhama. De la mano del Taller de Teatro Talía, la vida del Lazarillo de Tormes se ha representado este martes en la Casa de la Cultura llevándose el aplauso del público.
Con una puesta en escena minimalista, el público ha viajado siglos atrás viviendo estremecido las desgracias del pobre Lazarillo con los amos con los que se crió. A pesar de las desventuras del pícaro de Tormes, el gracejo con el que ha ido hilando Lázaro sus calamidades ha sacado a más de uno una sonrisa.