A la vuelta del verano continuarán sus caminos con las palabras que ayer les dirigieron sus profesores muy presentes. A lo largo de la ceremonia de graduación, los tutores de cada curso animaron a los alumnos a encarar su futuro con confianza y valentía. Y les recordaron que es en esta etapa de su vida cuando deben poner las bases de lo que será su carrera profesional.
El acto de graduación comenzó con las palabras de bienvenida de dos alumnas que luego fueron repetidas en árabe por otras dos de sus compañeras. Estas últimas también aprovecharon la ocasión para agradecer a sus padres "el gran sacrificio que hicieron para dejar su país y venir a un lugar desconocido, donde a pesar de no tener nada, nos lo dieron todo".
A continuación, Blas Santiago Carrillo, director del IES Miguel Hernández, destacó el trabajo realizado en los dos últimos años por los estudiantes que estaban a punto de licenciarse. También les animó a confiar en sí mismos y les aconsejó "que no abandonen sus sueños porque el tiempo corre a su favor".
Luego, después de los estudiantes entregaran flores a sus madres y hermanas, llegó el habitual y ya imprescindible momento del baile, esta vez, a cargo de un numeroso grupo de chicos y chicas
Seguidamente, siete estudiantes subieron al escenario para compartir con el público sus experiencias y algunos comentarios cariñosos y llenos de humor sobre sus profesores.
Más tarde, llegó el momento más emocionante con la imposición de las becas y la entrega de diplomas a los alumnos de las cuatro clases de Bachillerato que se iban a graduar. Y luego, los alumnos con las mejores calificaciones recibieron sus matrículas de honor.
Y para cerrar la ceremonia, alumnos de Bachillerato de Arte desvelaron la sorpresa que escondía un panel que había permanecido en el escenario durante todo el acto oculto tras una tela negra
La ceremonia terminó como había empezado, con aplausos tras las palabras de agradecimiento de un grupo de alumnas, primero en español y luego en árabe.