Entre el discurso de “la reina”, el anuncio de Navidad del PSOE y el corte de pelo abertzale de Antonio José Caja, esta semana las redes sociales locales y los whassap han estado especialmente ocurrentes. ¿No les ha llegado noticia entre felicitaciones navideñas, fotos de mesas espectaculares y chascarrillos sobre el solsticio?. Pídanselos a sus amigos y échense unas risas, que son gratis y mejor es reír que llorar o tomar pesambres.
Ahora en serio, no sé si alguien ha tenido estómago para tragarse el discurso navideño de la alcaldesa. Yo vi que empezaba y pasé el enlace por Whassap para echar unas risas, pero aunque me he puesto un par de veces a propósito, he sido incapaz de acabarlo.
Les ahorro el tiempo, a no ser que diga algo en los últimos dos minutos, no dice nada, lo que tiene su mérito porque son ocho minutos de hacer de busto parlante, que aunque lo haya hecho con voz monocorde y telepronter. Sin embargo, y aún reconociéndole el mérito, me pregunto qué sentido tiene ese intento de emular al rey. ¿Es un intento de mejorar su imagen o de relativizar la del monarca?. ¿Mejora la imagen de la alcaldesa el salir vestida a tono de árbol de navidad hablando 8 minutos sobre la paz en el mundo y lo importante que es todo y todos? ¿Es necesario? ¿Cuánto nos cuesta? (no, ni el del video, ni el de los discursos trabajan gratis, eso ya podéis descartarlo).
Nada, supongo que para compensar, el anuncio del PSOE ese que han pasado por Whassap subtitulado para que se entienda resulta un derroche de sinceridad. Como el corte de pelo de Antonio (el concejal de las mil cuentas en Facebook), que igual forma parte de la estrategia socialista de blanqueo de Bildu y el hombre de Paz, vaya usted a saber lo que pasa por esas cabezas.