Los socialistas no dan por hecho el nuevo colegio que se empezará a construir en breve en Librilla. Ya ha sido adjudicada la obra y los trabajos comenzarán en las próximas semanas. Sin embargo, los concejales del PSOE temen que puedan surgir problemas. Por ello, reclaman que exista una supervisión por parte de la comunidad educativa, de los ciudadanos y de los políticos.
El PSOE llevó su propuesta en forma de moción al pasado Pleno de agosto. De hecho, fue el único asunto incluido en el orden del día, al margen de los ruegos y preguntas y otras cuestiones de trámite.
Los socialistas instaron al alcalde a que convoque el Consejo Escolar Municipal para establecer un calendario de seguimiento de la obra del nuevo centro educativo. El inicio de la construcción de este colegio es inminente después de que la ejecución del proyecto haya sido adjudicada. Sobre este asunto, el PSOE introdujo una modificación en su moción, porque en el primer punto de la misma pedía que se instara al Gobierno murciano a que los Presupuestos regionales incluyeran una partida para la realización del proyecto. Los socialistas desconocían que la construcción ya había sido adjudicada y, por lo tanto, esa partida que reclamaban no tenía sentido puesto que ésta ya se encontraba recogida en las cuentas de la Comunidad Autónoma.
Eliminado ese punto de la moción, Antonio Huertas, portavoz del Grupo Municipal Socialista, defendió que era necesario hacer un seguimiento de la ejecución de las obras. Huertas recordó que en los últimos 20 años, los librillanos han asistido a varios actos de puesta de primera piedra y han recibido reiteradas promesas por parte de la Consejería de Educación sobre su construcción. Sin embargo, ha transcurrido el tiempo y sigue sin haber un nuevo centro que supla las necesidades de los estudiantes de Librilla ya que el Sagrado Corazón está completamente saturado. De hecho, no sólo este colegio está saturado, sino que parte de los alumnos de la localidad han tenido que matricularse en centros de otros municipios.
Huertas también recordó que estaba previsto que el nuevo centro se encontrara totalmente operativo en el curso 2022-23. Antes, la promesa había sido que entrara en funcionamiento en el 2021-22. Ahora, finalmente, si se cumplen los nuevos plazos, los alumnos podrán estrenar sus nuevas aulas en el curso 2023-24.
Sin embargo, después de tantas promesas incumplidas y retrasos, los socialistas desconfían pese a que el proyecto ya está adjudicado. "Necesitamos que exista un control por parte de la comunidad educativa, de la sociedad civil y de los políticos para conocer lo que sucede durante la construcción del nuevo colegio, para conocer los problemas que puedan surgir y darles solución. Eso es lo que pretende esta moción", explicó el portavoz socialista.
Finalmente, la propuesta fue aprobada por unanimidad en el Pleno del pasado jueves.