El Grupo Municipal de Vox ha sacado adelante, por unanimidad, la moción que presentó al pleno de marzo celebrado este martes en la que se instaba al pleno del Ayuntamiento a condenar los actos violentos que sufrieron simpatizantes del partido en las elecciones de Cataluña. La moción incluyó la enmienda de Ciudadanos en la que se extendía la condena a todo acto violento contra personas, partidos y, en general, a los "enemigos de la democracia".
La portavoz de Vox, Carolina Martínez, afirmó que es "intolerable" los actos violentos que acontecieron en el reciente proceso electoral en Cataluña en actos organizados por el partido en esta comunidad, máxime porque esos episodios violentos priva a los ciudadanos de sus derechos y libertades.
Más grave aún, sostuvo Martínez, porque los ataques e incluso agresiones físicas se dieron por motivos ideológicos y en medio de un proceso electoral.
Los grupos municipales estuvieron de acuerdo con la condena unánime a cualquier tipo de violencia "sea cual sea el motivo", apostilló el concejal popular, José Pedro Otón. La portavoz de Ciudadanos, Isabel Cava, destacó que es deber de los demócratas condenar la violencia.
El concejal Juan Romero (IU-Verdes) y Antonio José Caja (PSOE) coincidieron en que la exposición de la moción 'caía' al introducir la enmienda de Ciudadanos.
No obstante, Romero dijo estar de acuerdo con que se condene la violencia por parte de "enemigos de la democracia" a los que desde su grupo ha considerado siempre a los movimientos y partidos fascistas.
Un término que no gustó a la portavoz de Vox quien recalcó que ni ella ni su partido se sienten identificados con este movimiento.
Cerrado ya el debate de la moción, en el turno de Ruegos y pregunas, el concejal de IU-Verdes, negó haber aludido a Vox en ningún momento cuando habló de fascismo y subrayó que su voto a favor es a la enmienda, no a la moción.