La renuncia irrevocabel del popular Francisco Rubio al cargo de alcalde de Librilla abre la puerta a una nueva negociación entre el PSOE y UPrL para llegar a un acuerdo sobre su sucesor. Así, al menos, lo considera Antonio Huertas, candidato socialista a la Alcaldía en las elecciones municipales de mayo de 2019. En aquellos comicios, los vecinos de Librilla dieron con sus votos 5 concejales al Partido Popular, 4 al Partido Socialista y 4 Unión Progresista por Librilla (UPrL).
Con esos resultados, lo previsible era un pacto entre PSOE y UPrL, al menos sobre el papel. Sin embargo, desavenencias entre los cabezas de lista de ambos partidos hicieron imposible el acuerdo y dieron la Alcaldía a Francisco Rubio, que se había convertido en el candidato del PP a alcalde tras la renuncia de las dos personas que le precedían en la lista de su partido.
Ahora, con el adiós de Francisco Rubio, la situación política en Librilla vuelve a ser la misma que en mayo de 2019, tras las elecciones. Esa es la lectura que hace el socialista Antonio Huertas. En su opinión, ahora es tan difícil como entonces alcanzar un acuerdo con UPrL . Sin embargo, Huertas considera que "las actuales circunstancias hacen que el pacto sea más necesario que hace un año". El líder de los socialistas librillanos se refiere especialmente a la situación económica y empresarial generada por la pandemia del coronavirus.
Con ese objetivo, el secretario general del PSOE en Librilla cree que debe sentarse a hablar con los responsables de UPrL. Sabe que hay aspectos que dificultan en acuerdo, pero destaca que ambos partidos comparten muchas líneas programáticas.
El acuerdo imposible
Por otro lado, Huertas considera que si el acuerdo del PSOE con UPrL es "difícil", llegar a un pacto con el Partido Popular es "totalmente imposible".
Señala que hay, al menos, tres circunstancias que lo hacen inviable. En primer lugar, Huertas recuerda que el candidato del PP a la Alcaldía y la segunda persona de la lista presentaron su renuncia tras supuestas irregularidades para conseguir votos.
Además, señala, existe una pésima relación entre ambos partidos tanto a nivel regional como nacional.
Y finalmente, la única persona en el PP con la que, en su opinión, era posible llegar a acuerdos, Francisco Rubio, ha presentado la dimisión.
En estas circunstancias, el futuro político del Ayuntamiento de Librilla vuelve a estar en manos del PSOE y de UPrL. De la capacidad de los responsables de ambos partidos para alcanzar acuerdos dependerá que al frente de la comporación municipal esté o no un nuevo representante del Partido Popular.
De no haber pacto, Dolores Galián es la mejor situada en las lista del Partido Popular para convertirse en la nueva alcaldesa.