La celebración del Corpus Christi ha podido realizarse este año condicionada por la pandemia del coronavirus. La tradicional procesión con los niños vestidos de Primera Comunión por las calles de Alhama ha sido sustituida por una procesión claustral en la que también la pandemia ha tenido su papel protagonista.
Tanto a la entrada del templo, con gel hidroalcohólico para los fieles como el uso obligatorio de la mascarilla, y la limitación del aforo por la Fase 3 de la desescalada.
En estas condiciones se ha celebrado el Corpus en San Lázaro al tiempo que el Paso Morao ha iniciado los actos de su 75º aniversario con la colocación de un altar presidido por su imagen Titular.