El pleno de julio ha dado este martes el visto bueno a la cuarta renuncia al contrato de la basura y la declaración de la licitación desierta. Sin embargo, ello no restó tensión entre los concejales del Gobierno munincipal y los grupos de la oposición, concretamente, con Ciudadanos y Partido Popular que se abstuvieron en la votación.
Las cuatro empresas que se presentaron al concurso anterior han ido renunciando una a una. Ahora se abrirá un nuevo procedimiento de licitación, como ha anunciado el edil del área, Antonio García, para que Alhama tenga un servicio de recogida de residuos acorde a la realidad y necesidades del municipio.
Así se lo pidieron las concejales de Vox, que votaron a favor, mientras que el edil de Izquierda Unida, Juan Romero, ha considerado que "es el momento de ser valientes" y apostar por la remunicipalización de este servicio. Romero votó en contra.
La portavoz de Ciudadanos, Isabel Cava, ha recordado la postura de su partido a lo largo de este proceso en tanto que la licitación inicial debió tramitarse con la nueva ley de contratos ya vigente. Sin embargo, al no hacerse así el pliego de condiciones del contrato nació "viciado", en relación al periodo de amortización de la maquinaria que, después de la primera adjudicación, "lo quisieron meter a posteriori" y las empresas "no pasaron por el aro".
Las consecuencias, ha defendido Cava, para el municipio es que el servicio se encuentra prorrogado y la empresa "se ajusta al contrato", provocando un pueblo "sucio y con carencias".
Por su parte, Antonio García ha reprochado a la oposición que durante la elaboración del pliego de condiciones éstos no hicieran ninguna aportación y sólo el día que se llevó al pleno para su aprobación Ciudadanos trató de "boicotear" el contrato bloqueándolo junto con PP.
El edil socialista recordó incluso las palabras del concejal de IU Verdes, Juan Romero, cuando éste dijo que se abstendrían en la votación "tapándose la nariz" para no bloquear el contrato.
García ha indicado que el Gobierno municipal será firme en este asunto, pues se trata de uno de los contratos más importantes del Consistorio alhameño, y ha asegurado que el empeño del Ejecutivo es que las empresas cumplan con los contratos y no ocurra en Alhama lo que, ha sostenido, ocurre en otros municipios "que adjudican el contrato y luego las empresas quieren negociar".
Desde las filas populares quisieron saber si el nuevo contrato supondrá un aumento de la tasa de basura, cuestión que negó García.
Y explicó que hoy día la recaudación de la tasa de basura sólo cubre el 60% del coste del servicio y ha recordado que en 2015 aprobaron una bajada del 30% en la tasa para los vecinos mayores de 65 años.