Las obras debían comenzar en noviembre de 2015 y finalizar en febrero de 2016.
Pero en mayo de 2015, tras ganar las elecciones, el PSOE decidió de forma unilateral paralizar el proyecto, dejando a Alhama sin una infraestructura vital para su desarrollo y conexión.
Hoy, una década después, los mismos que lo frenaron vienen a exigir su construcción.
Y lo hacen como si no tuvieran responsabilidad alguna.
Esto no es nuevo: el PSOE de Alhama lleva años rechazando y frenando cualquier proyecto positivo que venga del Gobierno regional, anteponiendo los colores políticos a las necesidades de los vecinos.
Desde el Partido Popular seguiremos defendiendo lo que Alhama necesita, con hechos, no con titulares.