En una primera fase ya concluida, se procedió a la retirada controlada de los elementos de fibrocemento presentes en el inmueble, garantizando todas las medidas de seguridad y salud tanto para los trabajadores como para el entorno. Esta operación, realizada por empresas especializadas y conforme a la normativa vigente, supuso un paso fundamental para continuar con el proceso de demolición de forma segura.
Durante esta segunda fase, se ha llevado a cabo la demolición completa del edificio. De acuerdo con lo previsto en el Plan General Municipal de Ordenación (PGMO), el espacio resultante se destinará a la ampliación de la Plaza de la Concepción, transformándose en un futuro en una nueva zona verde que dotará al municipio de un entorno más agradable y accesible para el disfrute vecinal.