El equipo de Gobierno ha decidido encargar un informe a los técnicos para retirar los adoquines de la calles Postigos y sustituirlos por aglomerado. La obra tiene un coste de unos 70.000 euros y se llevará a cabo este año, probablemente en verano, la época que tiene menor tráfico.
Estos trabajos evitarán que, como ocurre ahora, el firme se deteriore paulatinamente con el paso de automóviles. "La calle sería de plataforma única, pero el carril para los vehículos sería en aglomerado para que no se produzca hundimiento", ha explicado este viernes el concejal de Infraestructuras, Antonio García. "El adoquín, al llevar un gravín debajo, ante el paso continuo de vehículos y, sobre todo de tráfico pesado, no soporta el peso", ha añadido.
Los técnicos habían indicado a los responsables políticos que debían elegir entre cerrar al tránsito de vehículos la calle Postigos o cambiar el firme. Hasta ahora, se había intentado reparar los baches, pero debido al tráfico intenso, el firme acaba deteriorándose de nuevo.
García ha recordado que el anterior equipo de Gobierno diseñó la calle Postigos para cerrarla al tráfico. Por ese motivo se proyectó el firme en adoquín. Sin embargo, tras acometer la obra, se cambió de decisión y continuó abierta al paso de vehículos.