La delegada del Gobierno explica que "con tan solo cinco años, María Egea tuvo que emprender camino del exilio. En 1939 embarcó junto a sus padres y hermanos en el puerto de Alicante con destino a Orán, como pasajera 2.388. Allí estuvieron internados en una cárcel mientras que su padre fue enviado a varios campos de concentración argelinos, hasta su liberación por los aliados. Permaneció en Argelia cerca de 50 años, ejerciendo primero como maestra y después como profesora de instituto. En 1996 se marchó a París, donde vive en la actualidad".
"Ha sido un gran aprendizaje escuchar de primera mano su historia y poderla conocer en persona", afirma Guevara.
"La democracia que disfrutamos hoy en nuestro país se la debemos a personas como ella, que fueron privadas de los derechos y libertades con los que contamos en este momento", añade.