Contaríamos con más de 30.000 m2, junto a una remodelada Plaza de la Constitución, para el disfrute de todas las edades, un lugar idílico que sería la envidia de los municipios de alrededor, en el que poder pasear a la sombra, leer junto a la vegetación, practicar deporte y disfrutar de un sinfín de experiencias y actividades en pleno centro urbano de Alhama. Pero, especialmente, un lugar único para mitigar el intenso calor y los efectos del cambio climático.
Sin embargo, por el capricho de la alcaldesa del Partido Popular, los alhameños no tenemos nada. Es incomprensible que esta señora haya liquidado una oportunidad única para la transformación y el futuro de Alhama, de la que se iban a beneficiar también nuestros hijos y nietos.