Los ánimos desde el banquillo dieron sus frutos, mostrándose nuestros cabezos más duros a la hora de luchar por los balones, y esto ayudó a propiciar distancias más cortas en el marcador, llegando a empatar el partido al final del 3º periodo. Sin embargo y a pesar del esfuerzo realizado, no son pocas las ocasiones en que este tipo de encuentros se resuelven con las decisiones que los jugadores toman en campo, y en este caso se mostraron precipitadas, con un abuso del tiro exterior que esa tarde no quiso dar sus frutos. Por otro lado los locales elaboraron mejor sus ataques y conseguían encontrar a sus jugadores de referencia para que, a pesar de los arreones llenos de orgullo y ganas de los nuestros, la ventaja local no bajase de los 5 puntos.
Estos sinsabores son también grandes maestros, de los cuales esperamos nuestros cabezos puedan aprender de cara a futuros compromisos. Aun así hay que felicitarlos por los resultados cosechados en esta segunda fase. Estamos seguros que nos traerán muchas más alegrías en el futuro.
C.B. LUMBRERAS 67 – 62 LOS CABEZOS C.B. ALHAMA