La Policía Local de Alhama detuvo el pasado viernes a un hombre al que hasta en dos ocasiones instaron a que se fuera a su casa por causar molestias en la vía pública. No obstante, se le han abierto diligencias, informa el Cuerpo en su red social, por un delito de desobediencia a la autoridad, con pena de hasta un año de prisión, y otro contra la seguridad vial, con pena de hasta dos años de prisión.
Los hechos ocurrieron en la noche del pasado viernes cuando los agentes fueron alertados de la presencia de una persona que estaba andando en la calzada, "generando un peligro para sí mismo y para el resto de usuarios de la vía". Al lugar acudieron los agentes quien instaron al individuo, con evidentes síntomas de haber bebido alcohol, a marcharse del lugar.
Relata la Policía Local que al rato recibieron una nueva llamada porque esta persona estaba increpando a los clientes de un local "e incluso llegando a intentar agredir a alguno de los presentes", por lo que regresaron al lugar. Los agentes observaron al individuo "deambulando por la calzada obligando a los vehículos a sortearlo y poniendo en peligro la integridad de los conductores y de sí mismo".