El órdago que lanzan al aire PSOE y Ciudadanos no podía llegarle en peor momento a la Región. El drástico cambio en consejerías, direcciones generales, alcaldes, concejales asesores y puestos de confianza aparejado a la importante posibilidad de que la moción fructifique va a mantener la Región y sus más importantes municipios paralizados durante un año crucial para la recuperación.
Se perderán subvenciones y oportunidades por falta de conocimiento y capacidad de gestión, amén de aquellas a las que se renuncie o se paralicen porque se considere que parezcan demasiado asociadas a gobiernos del PP. Mientras se organiza el reparto del nuevo aparataje de gobierno y éste se pone en funcionamiento, van a pasar meses cruciales en los que inevitablemente se van a retrasar actuaciones e inversiones que ahora mismo serían urgentes, e inevitablemente se dedicarán cantidades ingentes de dinero para promocionar la nueva entente, que no tiene otro interés que hacer la campaña de las próximas elecciones desde el poder.
Mi apuesta es que una vez que se produzca el cambio de gobierno regional es posible que desde el gobierno nacional se anuncie algún tipo de corrección puntual en la infrafinanciación que lleva sufriendo la Región de Murcia durante los últimos años, pero la inevitable bisoñez de aquellos encargados de gestionarlo hará que los murcianos poco lo noten.
De Conesa era completamente esperable y es lo que lleva intentando desde que se celebraron las elecciones, pero la temporalización y maneras del golpe de timón que ha protagonizado Ciudadanos no permite dejar la menor duda sobre su oportunismo y pérdida completa del norte y las esencias. El partido que dijo que venía a ejercer de estabilizador de gobiernos.
Me da mucha pena habérmelo creído una vez. Quién nos vio y quién os ve, Ciudadanos. Qué verdadera lástima. Espero que a los que les toquen los cargos que se repartan en esta segunda ronda les merezca la pena y se sientan satisfechos, y que los murcianos no se vuelvan a dejar engañar.
Si (
No(
